Andrés Imperiale : ❛Venir a Oriente fue un acierto❜

El argentino es uno de los pilares de la zaga albiverde. Su juego limpio y su capacidad como defensor lo hacen un jugador diferente. Está seguro de que Oriente tiene equipo para ser campeón y que mejorarán poco a poco
Ha demostrado al hincha, al técnico y a sus compañeros que es un jugador con un presente y un futuro brillante. De juego limpio, tranquilo, con pensamientos maduros pese a sus 23 años, Andrés Imperiale apunta a convertirse pronto en ‘ídolo’ de la afición de Oriente Petrolero. El zaguero argentino, que proviene de los registros de Rosario Central, dice sentirse a gusto en la ciudad y que además está feliz por estar “en el mejor grupo que integré desde que comencé como profesional”.
Sus últimas actuaciones lo han convertido en figura indiscutible como zaguero en la última línea junto a Héctor Gaitán, o como lateral izquierdo, donde sobresalió en el último clásico frente a Blooming (1-1). Por cierto, agrega que siente un sabor especial enfrentar a la academia y que le encanta ver a hinchas de ambos equipos sentados en una misma tribuna. EL DEBER lo visitó para conocerlo más a fondo y registrar el primer desafío al que apunta desde que llegó: “Quiero ser campeón con Oriente”.

- ¿Cómo han sido estos primeros meses en el club?
- Estoy feliz por haber tomado la decisión de venirme. Los seis meses anteriores a mi llegada no habían sido buenos futbolísticamente hablando, en cambio ahora tengo otro panorama, estoy a gusto porque se ha avanzado, y porque además, hay proyectos importantes con este plantel.




- Bolivia, para un argentino, no es un mercado bueno, ¿vos cómo te animaste a venir?
- En San Martín de Tucumán jugué poco y fue por ello que opté por volver a entrenarme en Rosario Central, donde también tenía poca chance. Pero cuando Pablo (Sánchez) asumió como técnico acá, me preguntó si quería venirme, y no lo dudé. Ronald Raldes me había comentado que la ciudad era linda y que Oriente Petrolero era uno de los clubes más grandes del país. Agarré mis cosas y etoy acá.

- ¿Cómo te has sentido en Oriente y en el fútbol nacional?
- Hasta ahora estoy bien, por ahí cuesta un poco el tema de la altura, pero trato de adaptarme de la mejor manera. Por suerte en el anterior torneo logramos puntos importantes fuera de casa, lo que nos posibilitó estar metidos en la pelea. Quizá juega también un papel importante el tema psicológico cuando se sube. Después, fuera de eso, me siento muy bien, creo que integro el mejor grupo desde que juego al fútbol profesional. Tengo compañeros que me llamaron la atención, como el ‘Mono’ Galarza, que es el mejor capitán y el mejor arquero que he tenido como compañero, además de otros chicos como Joselito Vaca o Marcelo Aguirre. Cuando deje el fútbol, seguramente voy a recordar mucho este paso.

- ¿Hay presión en Oriente?
- La hinchada creo que es similar a la de Rosario Central. Aunque, bueno, la presión siempre va a estar. Yo acá la vivo diferente, porque en Central era jugador-hincha, y me costaba digerir las derrotas porque mi familia y mis amigos son también fanáticos del club. En Oriente, la presión también es linda, y te repito, creo haber acertado al venirme para acá.
- En Argentina se acostumbra a entrenar sin tener la prensa tan cerca como acá. ¿Cuál fue tu impresión al ver estos cambios?
-Todo es bastante distinto, pero bueno, nosotros nos tenemos que acostumbrar a ustedes, no ustedes a nosotros. Quizá venimos de un fútbol donde hay un poquito más de privacidad. Además, está claro que en Oriente no hay mucho espacio para el trabajo de ustedes. Pablo (Sánchez) ha sabido acomodarse a la situación y no tener ningún problema hasta ahora demuestra que el grupo completo intenta llevar de la mejor manera cualquier situación que se presente.

- ¿Qué es lo que no te gusta del fútbol nacional?
- El tema del arbitraje, creo que es bajo y se tendría que mejorar. Es cierto, uno es un humano, puede errar, pero he visto cosas básicas, reglamentarias, que sorprenden. Desde sacar la amarilla a un jugador en el piso o dejar que éste entre en acción pese a que fue atendido por el médico, y no salió de la cancha como se establece.

- Se te considera un jugador limpio; sin embargo, has tenido dos expulsiones. ¿Por qué?
- Nunca había sido expulsado en mi carrera, pero acá ya sumo dos. Creo que la segunda, frente a Real Potosí de visitante, fue bastante injusta. Hice dos faltas absolutamente normales, sin riesgo de lesión y acabé viendo la roja. En el siguiente partido me dirigió el mismo árbitro, le hice recuerdo de la expulsión y reconoció que se había equivocado. Eso me gratificó un poco porque no tuve mala intención.

- ¿Qué le dijiste?
- Primero no te voy a decir el nombre del juez. Le pregunté si había mirado en la televisión la jugada y me dijo que sí, que la segunda falta no había sido para amarilla, pero ya estaba. Trato de que me saquen las menos amarillas posibles porque me gusta jugar limpio.

- Venís de un fútbol de fuerza, de choque, de velocidad, donde te dejan jugar. ¿Cómo ves el tema del roce en el fútbol boliviano?
- Se corta mucho el juego en choques normales. Por ahí te doy un ejemplo de que si chocan un jugador grande y otro chico, es lógico que el grande va a ganar, y acá se interpreta como exceso de fuerza. A mí me pasó en el partido contra Aurora. Pregunté al línea qué me había cobrado y me dijo “exceso de fuerza”; era lógico que un jugador de 1,85 iba a ganar al de 1,70, pero bueno, son cosas que están. En todos lados hay muchas cosas por mejorar, y acá creo que el arbitraje es una de ellas.

- ¿Cómo te sentís jugando de lateral izquierdo?
- La mayoría de los partidos en primera, en Rosario Central, los jugué en esa posición, más allá de que yo me siento más cómodo y puedo rendir mejor, jugando en la zaga. Pero no tengo problemas y cuando Pablo me dijo que me iba a utilizar en ese puesto le dije que no tenía inconvenientes, porque sé que el equipo me necesitaba ahí y yo le tengo que responder.

- Una de las cosas que sorprenden es lo bien que te has complementado con Gaitán...
- Lo conocía desde cuando él jugada en Newell’s Old Boys y yo en Central. Nos cruzamos un par de veces, pero jamás habíamos jugado juntos hasta mi llegada a Oriente. Tenemos una buena relación, que eso es importante, como también la tenemos con Gutiérrez y Méndez, dos centrales de un gran nivel con los que tenemos una lucha sana por el puesto.

- Qué problema para el DT, ¿no?
- Sí, pero son esos problemas lindos, porque además de los cuatro está Diego Terrazas y Lorgio Suárez, que también vienen pidiendo pita y que están haciendo las cosas bien. Entonces, uno no se puede dormir y mucho más los extranjeros, porque sabemos que hay chicos que quieren jugar. Éste es un grupo de 25 ó 30 jugadores que buscan un lugar en cada práctica.

- En Bolivia, ¿qué jugador te ha complicado?
- Me costó mucho marcar a Luis Gatty Ribeiro (Real Potosí) de visitante. Es un jugador que cuando agarra la pelota y encara es muy rápido. Por ahí, fue el partido que más sufrí, porque además sentí la altura. Si aquí en Santa Cruz rinde o no de la misma forma, igual creo que es de gran nivel.

- En los clásicos frente a Blooming se te ha visto seguir de cerca a Luiz Carlo Vieira, el jugador clave de la academia. ¿Era la misión que te encomendó ‘Vitamina’?
- Lo que pasa es que él (Vieira) tiende a tirarse por ese costado (izquierda) y es un jugador difícil de sacarle la pelota, sobre todo cuando está de espaldas. Además, si lo dejas pensar te puede hacer mucho daño y se hace necesario tomarlo de cerca. Gracias a Dios en los clásicos lo controlamos bien, pese a que en el último la victoria se nos escapó sobre el final.

- ¿Cómo has vivido el clásico de Santa Cruz?
- La verdad que me gusta muchísimo enfrentar a Blooming, sobre todo por el hecho de que la gente se mezcla en la tribuna (preferencia y general), ya que eso en Argentina no pasa, es prácticamente imposible, terminarían en una guerra. En cambio acá es lindo ver en la misma parte de la cancha gente con las dos camisetas.

- ¿Qué Imperiale se verá en adelante?
- El mismo, intentando crecer poco a poco porque no me conformo, recién tengo 23 años y aspiro a mucho más. Lo inmediato es terminar ganando el campeonato, quedó una espina importante porque el Apertura se nos escapó.

- ¿Por qué perdieron el torneo Apertura?
- Si lo atribuimos a la mala suerte sería no reconocer los errores que cometimos. Sin duda pienso que lo perdimos en Cochabamba, no jugamos un buen partido más allá del empate de ellos a dos minutos del final. Pero está claro que no se vio la dinámica que se venía mostrando y ya después contra Bolívar sólo nos faltó meterla.

- ¿Qué pensó el grupo cuando el ‘Mono’ Galarza se echó la culpa por el empate frente a Wilstermann?
- Él se echó la culpa porque es un señor, porque es un caballero, porque es el mejor capitán que tuve en mi carrera. Nos habló infinidad de veces, incluso había tapado un penal cuando estábamos 0-0. Lo que dice demuestra que es una gran persona y en lo personal, estoy orgulloso que él sea el capitán.

- ¿Están para ser campeones?
- No tengo dudas. Si mejoramos el tema goles, si seguimos consolidando la defensa, no tengo dudas de que somos candidatos al título.

Las frases

“El ‘Mono’ Galarza es el mejor capitán que he tenido en mi carrera. Es un caballero, un señor en la cancha”

“Me encanta jugar frente a Blooming, ver cómo se mezclan hinchas en las tribunas”