Oriente busca una salida a la deuda

Los patrocinadores y la recaudación, pueden salvar la economía de Oriente que sufrió un duro revés el lunes, cuando la Liga le comunicó que sólo le entregará $us 1.790 de los 56.500 que le correspondía por el 50% de los derechos de televisión (por temporada son $us 113.000). Esto debido a que la anterior gestión avaló que el ente liguero le pague $us 10.000 a Blooming y $us 13.000 a Wálter Justiniano Talavera.

Además, fueron descontados $us 16.710 (por gastos operativos) y $us 15.000 que se entregaron como adelanto a comienzo de este año. Mañana, en una conferencia de prensa, darán a conocer un sinnúmero de cuentas pendientes y los pasos a seguir, porque esta situación puede hacer tambalear la estructura, incluyendo al aspecto deportivo.

“Después de conocer que nos queda poco dinero, tenemos que sustentarnos con lo que nos darán los sponsor y la asistencia a los partidos”, dijo Gary Suárez, director de la comisión de Marketing. Se estima que el club albiverde recibirá unos $us 250.000 en la temporada 2008, por concepto de patrocinio, ya que en lo que va del año se hizo contrato con Tigo, Soboce y la Cooperativa Jerusalén, entre otras empresas. También, existe mucha confianza por la respuesta de los hinchas, que en los dos primeros partidos de local superaron las expectativas de asistencia, dejando buenos ingresos a las arcas de la institución.

Aunque nos se darán por vencido, el presidente del club, Miguel Ángel Antelo, anunció ayer que pedirá al consejo superior de la Liga (será el viernes en Cochabamba), que deje sin efecto los avales del anterior directorio para que no se le descuente por las deudas a Blooming y a Justiniano.

Por su lado, el presidente de la comisión técnica, Ernesto Álvarez, no ocultó su molestia y dijo que Carlos Chávez, presidente de la FBF, tiene que dar razón de esta situación porque él hizo uso y abuso de influencia a favor de su hermano Mario. El dirigente hacía alusión a los más de $us 20.000 que la federación le entregó a una señora de apellido Negrete, en los primeros días de diciembre del año pasado, y que era una parte del monto que le corresponde al club (tuvo el aval de Mario Chávez), por concepto de los derechos de televisión de la selección boliviana.

El DT estudia el sistema
El técnico Buenaventura Ferrerira aún no definió si contra Wilstermann mantendrá el mismo equipo, que le ganó (4-0) a San José el pasado domingo en Santa Cruz, por la segunda fecha del Apertura.
Entre hoy y mañana, el DT decidirá si mantiene a Eduardo Melgar como lateral izquierdo y si la plaza de sub 20 la sigue ocupando el juvenil Ronald Romero. Los dos tuvieron un rendimiento que dejó conforme a Ferreira.
Sin embargo, puede haber algunos movimientos tácticos, ya que será el primer partido de Oriente fuera de casa, tras haber ganado en los dos anteriores, resultado que tiene a los albiverdes como líderes del torneo.
“En Cochabamba siempre hicimos buenos partidos y trajimos puntos. Tenemos que mantener el nivel”, señaló Marcelo Aguirre, que afirmó que cada vez está mejor en la parte física, tras una lesión.

De taquito

La ropa joma llegará
Francisco Zeballos, representante de Joma en Bolivia, dijo que en estos días llegarán los nuevos uniformes del plantel albiverdes, con los colores sugeridos por la nueva directiva. “No hubo retraso, ya que la ropa estaba, pero tenía colores que la anterior dirigencia había aprobado y que la nueva rechazó”, aclaró.

La deuda millonaria
Según un informe preliminar, que dio a conocer la dirigencia días atrás, las deudas del club albiverde bordean los $us 1.300.000 por la anterior gestión, pero fue un anuncio a grandes rasgos, ya que luego de la auditoría, que se hará durante dos meses, las obligaciones que se contrajeron pueden ascender mucho más.

Cuatro lesionados
Son cuatro los lesionados en el plantel. El único que está descartado hasta mitad de año es Juan Pablo Fernández, que fue operado de los ligamentos de una rodilla. Velasco, que fue operado de menisco, está en la última etapa de recuperación; mientras que Jiménez y Molina pueden reaparecer en pocos días.

El Deber